Sábado, 24 de agosto 2019, 10:31
El Llano de Santa María volvió, ayer, a convertirse en el mejor escenario para la tradicional 'quema del rabo del diablo'. Una singular celebración que, en vísperas de la festividad de San Bartolomé, patrón de Jerez, tiene como protagonista al fuego como elemento purificador y está presidida por dos «monigotes» que representan al diablo y la diabla. Sobre el Llano de Santa María los 'Amigos de la quema del rabo del diablo' dispusieron hileras de pasto, formando cuadros, y terminados en un «rabo», a los que se les prendió fuego. Cuando las llamas comenzaron a extinguirse, pequeños y mayores saltaron por encima de ellas.
mari paz romero
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