

El cineasta y artista visual jerezano, Juan Pedro Guerrero, popularmente conocido como Judro Guerrero, finaliza su primera película «En la escucha» en los estudios de «Cinecolor» en Bogotá, Colombia. Culmina, así, la primera película escrita, dirigida y protagonizada por un jerezano.
El film, rodado en Jerez de los Caballeros, Nepal, Islandia y Georgia, se trata de una coproducción internacional España-Colombia, de la que forman parte Diana Ramos Medina de LAIMA Producciones (Colombia), Patricia Sánchez Mora de Novena Nube (España) y el propio Judro Guerrero de Trieb Films (España). Una película cuyo proceso de elaboración ha durado cinco años y cuyo proceso creativo ha sido una construcción desde el sonido a la imagen.
Además, «En la escucha» cuenta con la participación de Carolina Yuste, actriz extremeña, «Carolina es una de las actrices con más talento de este país. Fue un encuentro muy enérgico, encontramos perspectivas comunes, ya que somos de la misma generación. Eso lo hizo todo más fácil. Para mí, era muy importante que ella estuviese en el proyecto. Buscaba una voz sonoramente femenina pero no-binaria, que conservase el habla sin reivindicarlo. Era la primera vez que se enfrentaba a algo así, a una película con una narrativa tan inusual, pero lo cogió todo al vuelo. A Carolina hay que dejarla hacer. Ella fue muy generosa al participar en esta película, puso mucho de su parte para que pudiese salir adelante y tener la voz en off lista antes de que yo me marchara a Colombia para finalizarla», indica Judro.
Raíces
«En la escucha» plantea, no solo un recorrido por la dehesa del suroeste de Extremadura, sino un recorrido interior y místico de los trabajadores del campo con la tierra, con sus raíces, en este caso, a través de Juan y Bruno, dos hermanos e hijos de yunteros, que resisten al paso del tiempo bajo el amparo de un antiguo olivar, «mi voluntad ha sido la de dar una experiencia sensorial única, construyendo una narrativa tacto-sonora. La búsqueda ha sido la de una historia holística de los árboles, de la naturaleza, nada convencional, contada desde el punto de vista de un olivo de 400 años. Y es que cuando llega el verano, el sol devasta todo resto de vida y el paisaje permanece doblegado en el sosiego de las horas de sol, por lo que la vida de la gente del campo es relegada a la sombra de los árboles en un largo contemplar de la naturaleza inmóvil. Ahí, sobre las copas de esos olivos se percibe algo extraño, el silencio es interrumpido, un ser invisible que, por momentos, habita en las copas de los árboles y duerme en las raíces».
Un film en el que se refleja la importancia de las manos como elemento de diálogo entre el hombre y la tierra, manifiesta Judro, «desarrollé unos guantes que capturan el sonido a través de la vibración de los materiales, así que la película está escrita como un cántico o como un salmo».
El propósito es que las personas que la visionen se dejen llevar por ese viaje sensorial, de los sentidos, y se adentren en la mística de nuestro paisaje, «en el legado que nuestros ancestros dejaron sobre la tierra y que permanece en ella. Es una película para observar con la piel. No es tanto una historia que trabajar con la cabeza. Eso sí, la película es exigente con el espectador, le pide una voluntad de mirar».
Durante estos cinco años, «solo las personas que me han acompañado en este viaje pueden entender el sacrificio, exigencia y trabajo que ha supuesto mi primera película. El poder haberla realizado junto a mi abuelo, de 93 años, durante todo este tiempo es algo extraordinario». Por otra parte, señala Judro, «también, me ha permitido viajar por países como Colombia o México, donde comprendí que es una historia universal, que transmite emociones en otros continentes».
Respecto a su estreno, este joven jerezano señala que «me gustaría que se estrenase principalmente en un festival de cine que acoja propuestas innovadoras, arriesgadas y exigentes. Así que no sé dónde podría ser, eso forma parte de la etapa de distribución, aunque tengo mis preferencias y mis intuiciones, esperaremos a ver qué destinos nos trae el camino».
Proyectos
En la actualidad, Judro Guerrero se encuentra inmerso en otros proyectos, «estoy con un par de proyectos que comienzan su andadura. Del que puedo dar una aproximación es de 'Mímesis', un proyecto que también nace aquí, en Jerez de los Caballeros. Hablará de los tiempos actuales, de cómo imitamos las imágenes que observamos de los otros, de manera consciente o inconsciente. y las repetimos en nuestro día a día. Una especie de análisis de la estética de los iconos de nuestro tiempo, al menos, sobre el guión. Versa mucho de lo intrínseco, del análisis, presente en 'El Iconostasio: una teoría de la estética' de Pável Florenski. Tendrá un tono delirante y estará protagonizado por dos cabezudos».
Reconocimientos
«En la escucha» fue seleccionada el pasado año en el Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias (Colombia), siendo la ganadora de la Sección Oficial WIP- Puertolab, «fue un orgullo ya que es el festival de cine más antiguo de latinoamérica y uno de los más prestigiosos del continente americano». También, fue seleccionada en la sección «Neo Screening», propuestas radicales del cine español, en el MAFIZ, mercado del festival de cine de Málaga y, en su versión work-in-progress, en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara (México), dentro del marco DOCULAB 12.
Además, este joven cineasta jerezano formó parte del evento cinematográfico EXTREMLAB que se celebró en Badajoz, un híbrido entre festival de cine y laboratorio de creación; y participó en las jornadas sectoriales de las Artes Visuales, un evento que congregó a los profesionales de las artes extremeñas en el Museo Helga de Alvear, dentro del programa de Cáceres Abierto.
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