Carmen Díaz García celebra su 100 cumpleaños

Carmen Díaz García, vecina de Jerez de los Caballeros, aunque natural de Valle de Santa Ana, celebra este domingo, 15 de agosto, su 100 cumpleaños.

Una celebración íntima en la que estará arropada por el cariño de su familia, y es que Carmen, como dice Candi Méndez, su nieta, desprende una luz especial. Candi ha tenido la suerte de compartir toda su vida a su lado y la define como una persona luchadora, honesta, fuerte y sincera, «es difícil definirla en una sola palabra. Ella, siempre, ha sido y es una fuente de sabiduría y, cada día, nos enseña una lección de vida. Esta es, sin duda, su mayor virtud». Incluso, posee una gran capacidad de adaptación a los cambios, «ha pasado de fregar a mano a darle directamente al robot aspirador», exclama.

De familia humilde y trabajadora, Carmen ha dedicado su vida a las labores del campo y el cuidado de casas. Es viuda hace 40 años y madre de 3 hijos, «también, tengo 9 nietos, 3 bisnietas y otro que viene en camino», indica la cumpleañera con alegría. Aunque nació en Valle de Santa Ana, se considera muy jerezana, «me vine hace 28 años a Jerez con mi hija Candi» y, aquí, en el Barrio Alto del municipio, aún, siguen viviendo juntas, «mi madre ha pasado fatigas y ha trabajado mucho para criarnos, educarnos y sacarnos adelante. También, ha vivido situaciones muy complicadas como la muerte de mi padre y la de mi hermano Juan a los 49 años de edad. No obstante, viviendo juntas nos hemos dado consuelo y apoyo la una a la otra», indica su hija Candi.

Unas situaciones difíciles, destaca, también, su nieta, «que nos han unido más, ya que ella se convertía en nuestro pilar fundamental, pues, como siempre dice: si nos quedamos en los momentos malos, nuestra vida terminaría». Por tanto, manifiesta, «es un orgullo poder decir que tengo dos madres. Desde aquí, aprovecho para darle las gracias por todo lo que ha hecho por mí y por toda la familia, y decirle que la queremos muchísimo».

Unos 100 años que no le han impedido, destaca su hija, seguir llena de vitalidad, «sigue siendo una persona activa, aunque no sale sola a la calle, sí salimos juntas a dar paseos, los domingos nos vamos al campo, y aún tiene su cabeza muy bien amueblada. Ojalá podamos seguir disfrutando de ella y con ella muchos años más».